Otra novedosa especialidad es la sicoterapia emocional en odontología, que elimina miedos, fobias y hábitos, y que ayuda a los pacientes a recuperar la seguridad y la felicidad por medio de la sonrisa. Si te valoras y valoras la calidad de tu sonrisa, dicha sicoterapia es la solución.
Y si quieres que el año mejore y esté lleno de energía renovada, que te apliquen una hidroterapia del colon. Resuelve la depresión, el letargo, las flatulencias, el mal olor del cuerpo y la falta de memoria. No falla.
Como tampoco la filosofía de la kabbalah. Uno de sus gurús, el rabino Yuehudá Berg visitó México e impartió conferencia magistral en la que dijo que no hay que tratar de cambiar el mundo con el pensamiento, que así se transformará mi vida. Trajo hilos rojos que al colocarse en las manos protegen contra el mal de ojo. Uno de los asistentes confesó que si entiendes esta doctrina ayudas a cambiar el mundo y terminar con el caos. Ya buscan a Berg, Calderón, Obama y Sarkozy.
En esa misma línea de acción se ofrece el taller del Péndulo Hebreo, muy importante para los tratamientos bioenergéticos, más efectivos si se complementan con las esencias florales del Mediterráneo (en especial las de Bach), que mejoran los desequilibrios emocionales y sicosomáticos habituales y típicos de nuestro tiempo.
Ya encarrerados, si por cualquier causa le van a amputar un pie, ¡no lo permitas!, piden los que curan muchos males con la medicina hiperbárica, la de la hiper oxigenación: desde el edema cerebral y la diabetes hasta la cirrosis, la gangrena y la embolia. Se aceptan tarjetas de crédito y hay descuento para los de la tercera edad.
Si todo lo anterior no le sirve, recurra al poder prodigioso del Fucoidan, recomendado por el doctor Daisuke Tchikawa para desaparecer las células del cáncer y derrotar la temible enfermedad. De perdis, aminora los efectos de la quimioterapia.
Finalmente, y en caso extremo, utilice el hongo michoacano. Se vende por doquier. No respondemos por sus efectos colaterales.
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