Según la Iglesia, el caso se mantuvo en el silencio para respetar la voluntad de la víctima.
Un ex obispo católico noruego admitió el abuso sexual de un menor en un hecho ocurrido hace 20 años. El hecho lo dio a conocer la Iglesia Católica de Noruega, en un comunicado que contó con la autorización del Vaticano.
Según el comunicado, Georg Mueller, ex obispo de Trondeim, ciudad a unos 500 km al norte de Oslo, la capital de Noruega, ha estado sometido a terapia desde que reconoció su delito.
El comunicado también afirma que el caso no se había hecho público con anterioridad por respeto a la voluntad de la víctima, quien es ya adulto.
Las informaciones de la prensa noruega dicen que se trata de un ex monaguillo, ahora en la treintena, quien recibió cerca de US$70.000 en compensación.
Nacido en Alemania, Mueller renunció al obispado de Trondheim el año pasado. En ese momento, se dijo que su partida se debió a enfrentamientos respecto a su manera de ejercer su cargo.
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Más denuncias
El caso de Mueller viene a agregarse al de Italia, hecho público ayer, en el que un sacerdote habría abusado de de un niño en la localidad de Casal di Príncipe, en el sur de Italia.
Según el corresponsal de la BBC en Roma, David Willey, el abogado que representa a la familia del menor documentó, durante la década pasada, más de 130 casos de presuntos curas pedófilos.
El Vaticano se ha visto atacado, recientemente, por su responsabilidad en el manejo de denuncias de pederastia en contra de sacerdotes desde varios flancos. A las denuncias de Irlanda, se sumaron los casos de Estados Unidos, Alemania y Suiza, entre otros países.
La Santa Sede ha rechazado las acusaciones de encubrimiento en casos de abuso sexual de menores y afirma que se trata de una campaña de prensa destinada a atacar la fe católica.
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