Daniel Nuud: subdirector del Instituto Internacional de la Paz
La llamada "Flotilla de la Libertad" se encontraba en aguas internacionales cuando Israel lanzó su operativo militar.
El Derecho Internacional estipula que las aguas internacionales son de libre circulación: ningún estado tiene jurisdicción sobre ellas.
Sin embargo, Israel justificó su intervención apelando al derecho a la defensa propia.
BBC Mundo dialogó sobre el tema con el subdirector del Instituto Internacional de la Paz de Estocolmo, Daniel Nuud, experto en derecho internacional.
El operativo israelí tuvo lugar en aguas internacionales. ¿Es por lo tanto ilegal desde el punto de vista del derecho internacional?
El derecho internacional no permite este tipo de operación.
En aguas internacionales un estado puede intervenir en un caso de piratería o de tráfico de drogas, pero no en este caso.
Israel no es signataria de la Convención sobre ley marítima de 1982 que rige en estos temas, pero sí de la ley anterior, de 1958, y tiene que cumplir con el derecho consuetudinario internacional que establece claramente qué es legítimo.
Desde el punto de vista internacional Israel puede argumentar que tiene derecho a reaccionar de esta manera porque es en defensa propia ya que está en conflicto con Hamas
Eso es lo que ha argumentado Israel, que fueron atacados por miembros de una organización terrorista internacional. ¿No hay en este caso derecho a la autodefensa?
Israel lo ha hecho en el pasado, en 2002, por ejemplo, cuando intervino un barco en un intento de contrabando de armas a la Franja de Gaza, pero este caso es totalmente distinto.
El tema de la autodefensa es polémico a nivel del derecho internacional pero en este caso no se puede aplicar para esta flotilla.
Si esto es ilegal desde el punto de vista del derecho internacional, ¿qué pasa ahora?
En este caso Turquía es el país afectado y podría lleva el caso ante la Corte Internacional de la Haya, pero para eso necesita que Israel acepte la jurisdicción de esta corte.
La otra ruta desde el punto de vista internacional es político-diplomática. Turquía puede llevar esta situación ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas o ante su Asamblea General.
En el primer caso las resoluciones son vinculantes, pero habrá que ver la posición de Estados Unidos sobre el tema. En el segundo la resolución no es vinculante, pero tiene peso político.
Usted es subdirector del Instituto de Paz de Estocolmo. ¿Qué impacto tendrá para la paz?
Es prematuro decir el impacto que tendrá sobre el Medio Oriente en general, pero no cabe duda que habrá un fuerte deterioro de la relación bilateral turca-israelí.
Esta relación sufrió un gran desgaste durante el operativo israelí en la Franja de Gaza en enero del año pasado.
Por el momento Turquía ha llamado a su embajador en Israel, un mensaje muy fuerte a nivel diplomático. No quiere decir que vaya a cortar relaciones diplomáticas, pero tampoco es posible descartarlo.
Esta situación podría cambiar el bloqueo a la Franja de Gaza.
A corto plazo no. A mediano plazo sí, porque vuelve cada vez más difícil para Israel mantener el bloqueo.
Como ha dicho un observador, lo sucedido es un gol en contra de Israel.
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